Vi la tanguita sucia en el baño y me fue inevitable no agarrarla, me comencé a pajear con ella, al poco rato la mamá de mi amigo me encontró masturbándome con su tanga, ella abrió la puerta de repente, pensaba que no había nadie adentro, y me descubrió con su hilo en mi verga. Lejos de enojarse, la señora me dijo que había ningún problema y hasta me preguntó si me podía ayudar con sus manos, su boca o sus tetas, a lo que yo accedí de inmediato. Ella se agachó y comenzó a mamarme la pija y a disfrutarlo.
La muy puerca andaba en celo y en cuanto me vio masturbándome con su tanga se le calentó la concha, no dudó ni tantito en quedarse ahí conmigo para poder ayudarme a sacarme la leche con su boca. Sus grandes tetas se le veían tan jugosas y deliciosas en ese escote, me daban ganas de sacárselas para ponerme a mamárselas, lamentablemente no pude hacerlo, teníamos poco tiempo, aun así pude disfrutar de una gran mamada de verga por parte de la mamá de mi amigo, lo mejor de todo fue cuando le oriné en la boca a la perra.
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Mamadas Milfs Tetonas
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