Que rico maman la verga las señoras, son mujeres experimentadas que no tienen vergüenza de nada. Para prueba, mi suegra que es bien puta, ella goza de mamar mi pito y mis huevos, me lengüetea todito ahí abajo, como toda una cerda desesperada, realmente es toda una experta en hacerme sexo oral. Nuestros encuentros sexuales prohibidos en los hoteles de la ciudad siempre están llenos de perversidad, sobre todo por parte de ella, ya que antes de que yo fuera su yerno no había cogido con nadie en mucho tiempo. Estaba muy urgida por sexo la madre de mi mujer.
Fui yo quien me la llevé a la cama después de mucho tiempo que nadie lo hacía, desde que quedó viuda hace varios años. La vieja gorda y caliente vio en mí a ese nuevo macho que lograría darle mucho placer., y al final fue así como sucedió. Mi suegra y yo no hemos parado de escaparnos a hoteles para coger bien rico, es ahí donde ella me enseña lo delicioso que mama la verga, es bien puta y no siente ninguna culpa de tener sexo a escondidas con el hombre de su hija.
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