Estando sola en su casa quería que le arreglara su regadera y terminé cogiéndomela en su cama. Vecina me pide ayuda y me entrega su culote gordo para que le de un buen culeadón, en lo que su marido se encontraba trabajando. Pude notar que la señora de nalgas enormes andaba muy deseosa por mi verga, por eso ocupó como pretexto su regadera, para tenerme adentro de su casa y seducirme. Ella sabía perfectamente que yo me dedicaba a eso de la fontanería, así que su plan fue descomponer la regadera para después llamarme y pedirme ayuda mientras estaba solita.
Tantas ganas me tenía la señora casada, que no se supo controlar. Ella ideó todo y esperó al momento perfecto para entregarme sus nalgas enormes, que tanto disfruté mientras le metía la verga, de a perrito, en su colchón. La verdad es que al principio, cuando mi vecina me pide ayuda, creí que todo iba a transcurrir normal, pero la situación se puso bien caliente cuando la perra caliente se me apareció en calzones. Ahí fue donde me di cuenta que quería una buena cogida y no me quedó de otra que complacerla.
7052 00:30
Categorías
Culonas Gordas Infieles
Etiquetas
AmantesarrechasCogiendoCulos grandesmaduras infielesmaduras XXXmexicanas caseros xxxNalgonasseñoras XXXurgidasvecina