Me habló por la mañana, justo después de que su esposo se fuera a trabajar, para que fuera a calmarle su ganas. Casada infiel me da unos sentones adentro de su cocina, en donde minutos antes le había preparado el desayuno a su hombre para que lo llevara al trabajo. Es una esposa bastante responsable, pero ese culito rico que tiene no lo puede controlar, cada vez que se le calienta la panocha quiere que yo le vaya a apagar el fuego, ya que mi verga la trae loquita y no puede pasar mucho tiempo sin probarla ni tenerla adentro.
Ella es mi vecina y desde hace tiempo me la ando comiendo adentro de su propia casa, ya que la muy descarada no siente ningún remordimiento al meterme ahí y ponerle los cuernos a su esposo. Es una ama de casa sin hijos y todos los días se queda solita y sin supervisión, así que se aprovecha de eso para tener encuentros sexuales conmigo ahí mismo. Es tanto el placer que le doy que incluso me ha pedido que la embarace. Tan solo vean con que intensidad esta casada infiel me da unos sentones mientras estamos cogiendo en su cocina.
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