Los dos somos casados pero eso no impidió que nos diéramos una escapada al hotel para coger rico. Me chingo a una madura de a perrito, haciéndola gozar y gemir rico, hasta que al final le echo toda mi leche en su cara. La zorrita es mi compañera de oficina y desde cuando teníamos ganas de comernos, a pesar de que los dos tenemos nuestros matrimonios. Andábamos tan deseosos por culear que finalmente nos decidimos a escaparnos y tener un delicioso encuentro entre nosotros, en lo que nuestras parejas estaban en la casa, sin sospechar absolutamente nada.
Y es que bien dicen que lo prohibido es mejor y más cuando se hace a escondidas. Ya estando en el hotel con mi compañera, la empiné bien rico en la cama y comencé a darle hasta adentro sin condón hasta que me dieron ganas de salpicarle todo mi esperma en su rostro. Ella se levantó y se volteó, después de que le di una buena cogida, para recibir la lluvia blanca que tanto esperaba. Así que si eres adicto al porno casero, no puedes perderte este video en donde me chingo a una madura de mi trabajo.
4010 00:52
Categorías
Milfs Xvideos
Etiquetas
AmantesarrechasCogidasCogiendoLatinas XXXmaduras infielesmaduras XXXMilforgasmosPeruanas