Que rico la hice gemir mientras me la culeaba a pelo, ya le traía unas tremendas ganas a ese culote. Me cogí a la chacha aprovechando que mi esposa no estaba en la casa, ya que se había ido a una junta de padres al colegio de nuestra hija. Era una de esas pocas ocasiones en la que me podía quedar a solas con la señora del aseo y no podía dejar pasar la oportunidad de chingármela bien rico, haciendo que me entregara esas grandes y sabrosas nalgotas redondas. Solo fue cuestión de ofrecerle dinero para que accediera a culear.
Y es que raras son las veces en que una sirvienta no accede a coger con su patrón luego de que les ofrecen dinero. Todas son putas y siempre tienen fantasías con los señores de la casa en donde trabajan, por eso caen redonditas. A parte de que se llevan una plata extra a su hogar. Tan solo vean este video casero en donde me cogí a la chacha, una madurita nalgona y sabrosa con muchas ganas de coger.
6488 00:53
Categorías
Culonas Sirvientas
Etiquetas
CogidasCulos grandesEmpleadas domesticasLatinas XXXmaduras XXXNalgonasPeruanassexo con jefe