Que delicioso se siente cuando dos boquitas te están comiendo la verga. Mi esposa y su amiga se pusieron a darme una mamada doble, comportándose como un par de putas ninfómanas y bisexuales. La de lentes y pelo ondulado es mi mujer y por fin pude convencerla de hacer un trio con la perra de a lado, con la que lleva una amistad de muchos años. No fue tarea fácil, ya que mi compañera de vida era de mente muy cerrada, así que primero tuve que convertirla en toda una adicta sexual dispuesta a todo. Solo así conseguiría mi objetivo.
Sin duda mi fantasía sexual era un poco enfermiza pero todo valió la pena cuando por fin logré que mi esposa y su amiga fueran mis perritas obedientes y sumisas. Las dos estaban rendidas a mi y podía hacer con ellas lo que quisiera. Las más rico de todo es que la otra zorra era casada, pero estaba tan aburrida de su marido, que terminó aceptando este delicioso trío para salir de la rutina y volver a sentirse mujer.
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Amateur Mamadas
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